
El establecimiento de una red de malla es una manera de encaminar archivos de datos, voz e instrucciones entre los nodos. Las redes de malla se diferencian de las otras redes, ya que en esta los elementos de la red o nodo están conectados unos con otros, configuración la cual ofrece caminos redundantes por toda la red, es decir, que si un cable falla, el otro se hará cargo del tráfico.
A diferencia de la topología de Árbol y la topología de Estrella, no requiere de un servidor o nodo central, con lo que se reduce el mantenimiento. Si ocurre un error en un nodo, ya sea importante o no, esto no implica la caída de toda la red. Esto sucede gracias a que la red de malla es auto ruteable, es decir, que cuando existe una falla en nodo o la conexión falla, el resto de los nodos evitan el paso de los datos por ese punto. Es por eso que este tipo de malla se transforma en una red muy segura.
La red malla se puede aplicar de diferentes formas, ya sea en una conexión inalámbrica ( Wireless ), o también con las redes cableadas ( Wired ) y a la interacción del software de los nodos.
Este tipo de red es muy empleada en las redes de áreas amplias (WAN), tanto como en las pequeñas (LAN), por su ventaja de problemas de tráfico y averías, también por la multiplicidad de caminos o rutas, además de la posibilidad de poder orientar el tráfico por trayectorias opcionales.
Aunque su implementación es cara, y la instalación difícil debido a la cantidad de cables que se utilizan, pero aún así las empresas la prefieren por a seguridad y utilidad.
En la red de malla inalámbrica, pueden existir nodos que estén conectados con Internet y otros nodos que no poseen conexiones inalámbricas, combinando los recursos disponibles de internet, y por lo tanto, proporcionando una conexión más rápida y estable a Internet.
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